Sueño
Son las 3:30 de la madrugada, un recuerdo me viene a la mente, estoy en una playa en el mediterráneo leyendo el Werther, tomando un buen vino al lado de una hermosa mujer. ¡Oh podría morir aquí mismo! - pienso dichoso.
Vuelvo al pasado, estoy en la muralla del castillo, el Werther sigue en mis manos como un recordatorio de lo obvio. Una pregunta me azota la cabeza, ya no sé si es la madrugada de los Andes o una tarde en Alicante, ¿Soy yo quien sueña al joven del castillo o es él quien me sueña a mi?
¿Quién soy yo sino presente? me pregunto a mi mismo, me rehúso a pensarlo. De repente estoy con mi traje de gala. "Fünf Minute" se escucha en el fondo, la ceremonia está por empezar, la banda marcial toca Hurt de Johnny Cash, toco mi bolsillo, hay algo dentro, no necesito verlo, es el Werther, el fiel camarada de la instrucción básica.
"What have i become? My sweetest friend" cantamos en coro con cerveza en mano.
¡No! - Pienso de nuevo, me niego a aceptarlo.
Aquel no soy yo, ya no sé si lo fui, quiero gritar, no soy más que un sueño, el sueño de volver a casa, ya no quiero más tener un hogar.
Cierro los ojos, viene el final de la canción, mis lagrimas se escapan y después de un trago amargo recito:"If i could start again, a million miles away, I would keep myself, I would find a way"
Estoy en el puente San Marcos, una sirena me toma una foto, la conocí hace dos noches en el puerto de Pula, bajo la luna llena del muelle. No puedo hablar, ella me robó la voz, no me importa, recuerdo la noche anterior, estábamos en Verona frente al balcón de Julieta, recorrimos la Arena Romana, la ópera sonaba, las calles vacías solo para nosotros se abrían con sus callejones con tan hermosa banda sonora. Me paseaba con una musa por la ciudad de los Capuletos, de los Montesco, de los gladiadores, del resplandeciente renacer.
¡Oh Italia! ¡Oh mediterráneo! Qué tumba más perfecta. Miro el reloj , son las 5:12, pronto va amanecer. Es hora de dormir, pero esta vez no para soñar sino para despertar.
A continuación abro los ojos, río a carcajadas y susurro para mi:
No soy más que el sueño de mis sueños...